Los props y disfraces en las bodas dan un toque divertido en ciertos momentos de la fiesta. En la nota de hoy te invito a considerar tenerlos por las siguientes razones:
1. Acaban con el concepto de tu boda
Tenemos que ser completamente honestos, pasamos mucho tiempo eligiendo el mejor concepto de boda, según la temporada. Los colores, el tipo de flores, arreglos, decoración… para que al final acaben con el concepto que tanto pensamos para el día perfecto.
2. Asignar código de vestimenta no tiene sentido
Al igual que el concepto para muchos es importante la formalidad que le darán los invitados a tu boda con el código de vestimenta. No tiene sentido invertir en vestidos y trajes para acabar disfrazado con una máscara de luchador.
3. Las fotos y el vídeo terminan pareciendo fiesta de disfraces
Nunca falta el que jamás se quita el disfraz y se cuela en todas las fotos. Tomando en cuenta el punto anterior, la atmosfera termina convirtiéndose en fiesta de disfraces.
Foto | Sombreros y Vinchas
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Captura | Fernando O’Farrill
4. Todos terminan en el piso
La mayoría de los invitados se pone el disfraz 15 minutos y se lo quita después. Sin duda acaban en las pistas desarreglando el lugar.
Foto | Sombreros de Hule Espuma para eventos
Estos son solo algunos de los puntos que debes considerar antes de contemplar disfraces, al final lo que decidas para tu boda será lo mejor. Mi recomendación es no arruinar lo que planeaste con tanto esfuerzo, pero sí en realidad siempre consideraste los disfraces no cabe duda que tus invitados lo disfrutarán al máximo.
