Toda novia lo sabe. Para verse espectacular durante el gran día no solo es necesario invertir una considerable cantidad de dinero en tratamientos, maquillaje y ejercicio, sino que es imprescindible hacerlo con anticipación. Lo anterior se vuelve especialmente complicado cuando no se goza del tiempo ideal debido al trabajo, la organización del evento o incluso por compromisos personales, convirtiendo a cualquier alternativa que ahorre valiosas horas en un respiro absoluto.

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No es un secreto que una de las armas más poderosas de una novia es su sonrisa, y es por ello que es esencial poner especial cuidado a que luzca impecable en todo momento. Si deseas cuidar tu cartera sin sacrificar la blancura y apariencia de tus dientes, pon mucha atención a los siguientes tips que hemos preparado para ti:

Bicarbonato de sodio

Una maravilla cuando se trata de blanquear los dientes naturalmente. La mejor forma de utilizarlo es justo antes del cepillado. Coloca un poco de estas partículas sobre tu cepillo de dientes húmedo y con movimientos circulares aplica en todos los dientes. Inmediatamente después, cepíllate con una pasta blanqueadora y no olvides repetir esta rutina todos los días.

Foto: Reader’s Digest

Kit de limpieza portátil

No hay alternativa, el día de tu boda tendrás que llevar entre tus pertenencias un pequeño cepillo con pasta de dientes e hilo dental. Cuando vayas al baño asegúrate de revisar que no te hayan quedado residuos de comida en la dentadura y pásate el hilo dental cuando sea necesario. Lo agradecerás al ver tus fotos.

Foto: Aliexpress.com

Usa un labial rojo

Llevar todos intensos en los labios como rojo, vino o marrones ayudará a crear un efecto más blanco instantáneamente en tu sonrisa. La mala noticia es que deberás elegir muy bien el producto que usarás, pues de no ser de larga duración deberás retocarlo constantemente y te arriesgarás que tener residuos de color en los dientes.

Foto: Lipstick Etc. 

Mascarillas para tu sonrisa

Si no deseas pagar grandes cantidades de dinero por ir a blanqueamiento dental, entonces puedes buscar en el supermercado una alternativa que sea efectiva y que no necesariamente arruine tu economía. En la sección de cuidado personal pregunta por bandas, sprays o geles blanqueadores que te permitan eliminar progresivamente las manchas amarillas del esmalte. Si tienes dientes sensibles opta por preparar tu propia mascarilla casera machacando una fresa con un poco de bicarbonato de sodio. Déjala reposar por 15 minutos y enjuaga con abundante agua. Aplícala dos o tres veces por semana y notarás los cambios.

Foto: Pinterest

Bye bye malos hábitos

El primer paso para tener una sonrisa de diez es eliminar los agentes que dañan el esmalte. El café, el refresco de cola, el cigarro, el vino y el chocolate son de los principales enemigos de una sonrisa blanca, sin importar qué tan costoso sea tu tratamiento blanqueador, no tendrá la misma efectividad si no te alejas de ellos.

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Foto de portada: Well Hung