4 cosas que debes hacer a menudo sin tu esposo para tener un matrimonio feliz

Generalmente, los portales de internet y páginas con consejos para relaciones hablan de todas las actividades que se pueden llevar a cabo en pareja para fortalecer el vínculo y tener un matrimonio sano. Sin embargo, la mayoría se olvida de los pequeños instantes en donde también es necesario que cada uno tenga un espacio para sí mismo sin necesidad de depender del otro. Con esto no estamos diciendo que alejar a tu pareja de ciertas actividades sea la mejor forma de tener un matrimonio feliz, sino que a veces es necesario tener un par de horas para relajarte, centrarte en ti misma y ¿por qué no? echar de menos un rato a tu amado. A continuación cuatro cosas debes sin tu esposo de vez en cuando:

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Darte una mañana o tarde de belleza– 1 vez a la semana

No necesariamente nos referimos a que tengas que ir al spa o a la estética –que también es recomendable de vez en cuando– para relajarte y consentirte, sino a que hay rutinas de belleza y rituales para mejorar tu apariencia y sentirte mejor que son verdaderamente incómodas de llevarse a cabo frente a tu pareja. Si tu esposo tiene que salir un sábado por la mañana o un jueves por la noche, te recomendamos que armes tu propio spa en casa y que aproveches para depilarte, ponerse esa mascarilla verde que le va también a tu rostro o experimentar con tratamientos caseros para el pelo. Todas las mujeres lo necesitan de vez en cuando.

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Ir con tus amigas a desayunar, comer o cenar– 1 vez a la semana

Tanto tú tienes que aceptar que el se reúna de vez en cuando con sus amigos como él debe tener la confianza de que no porque salgas a solas con tus amigas lo quieras menos. Tener un tiempo para platicar sus situaciones, alegrías e ilusiones con las personas cercanas a ti sin preocuparte de que tu pareja la pase bien o de que se sienta cómodo es algo que ayudará a la relación lejos de afectarla. Establece salir una vez a la semana a desayunar o a comer con tus mejores amigas y notarás un cambio positivo en tu estado de ánimo.

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Convivir con tu familia– 1 vez cada 15 días

Es importante que ambos vayan a visitar a sus respectivas familias a menudo. Sin embargo, también es bueno que cada uno pase un poco de tiempo con sus seres queridos a solas. De esta manera, podrás platicar con tu madre o con tu hermana acerca de situaciones que quizá ellas no tienen la confianza de decirle a tu esposo. Siempre es necesario darle un poco de atención a quienes te han acompañado a lo largo de toda tu vida.

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Tomarte unas horas o dar un paseo a solas para meditar– Cuando lo sientas necesario

Esto puede sonar un poco dramático, pero no nos referimos a que tengas que escaparte la tarde entera para filosofar sobre qué has hecho en la vida, sino a que reflexionar e incluso recordar tus momentos de mayor felicidad mientras despejas tu mente siempre es una buena idea cada vez que lo necesites. Para evitar problemas, no des a entender que algo anda mal, simplemente con la excusa de ir a comprar un café, de pasear al perro de leer un libro en el jardín podrás tomarte tus 30 minutos de relax.