Si creías que después de pasar por el altar todo sería color de rosa, estás muy equivocada. Al iniciar una nueva etapa, también inician nuevos retos y conflictos que podrían desgastarlos más de lo necesario. Cuando esto sucede, no hay de que preocuparse, pues es común que durante el primer año juntos surjan situaciones que jamás habían esperado. A continuación cinco peleas que inevitablemente tendrán durante el primer año juntos:
Hábitos que no conocías
No es un secreto que terminas de conocer a tu pareja hasta que vives con ella. Por esto, necesitas prepararte para descubrir el lado oculto de sus hábitos. Él puede detestar que dejes tu maquillaje en el estante del baño y quizá tu no soportarás encontrarte constantemente con toallas mojadas sobre la cama. Para superar esto se requiere paciencia, tiempo y sobretodo comunicación.
Limpieza del hogar
Al principio seguramente estarás encantada de lavar los platos de tu nuevo esposo y de tender la cama. Pero después de unos meses agradecerás infinitamente su ayuda. Si él se ofrece deja que te ayude, y si no lo hace hazle saber de una forma sutil que te encantaría que pudieran hacer las cosas juntos.
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Gastos inesperados
Antes quizá compartían la cuenta de una cena con amigos, pero ahora será necesario pagar renta, servicios, coche, vacaciones, comida, médicos y todo lo que puedas imaginar. Para evitarlo, desde un principio establezcan de qué forma contribuirá cada quien en el ámbito económico. Y sobretodo, no intenten controlar los gastos del otro, mejor platíquenlo y hagan ver sus inquietudes.
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Yo quiero esto, pero yo no
Desde elegir la película que verán, hasta decidir en dónde irá el nuevo sofá, son discusiones que las parejas enfrentan día con día. Cuando esto pase, no te cierres. Escucha los motivos de tu nuevo esposo e intenta llegar a un acuerdo mutuo. Hablando se entiende la gente.
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Falta de romanticismo
Esto no debería pasar, pues una relación debe nutrirse todos los días sin importar en qué etapa se encuentre. Sin embargo, cuando vives con alguien es más complicado que se mantengan ciertos detalle como que pase por ti todo el tiempo o que te marque para desearte buenas noches. Es lógico ¡lo tienes al lado! Por todo esto tanto él como tú podrían sentir por momentos que algo se está perdiendo, pero en realidad es el pretexto perfecto para encontrar nuevas formas de enamorarse.
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